Lionel fue exculpado por su asesor fiscal Angel Juárez, que aseguró que "nunca jamás" le explicó al capitán del seleccionado argentino sobre las sociedades que -según denuncia la Hacienda española- sirvieron para evadir impuestos por 4,1 millones de euros entre 2007 y 2009.
La presunta defraudación fiscal de la que están acusados Messi y su padre se originó por los derechos de imagen del jugador, que no pagó lo que le correspondía en concepto de Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) entre 2007 y 2009.
En ese período Lionel facturó más de 10 millones de euros. Al momento de pedir las penas las acusaciones tuvieron en cuenta el pago previo de 5,1 millones de euros a la Hacienda así como la regularización de los siguientes ejercicios fiscales, que no estaban bajo investigación.
"Yo sólo jugaba futbol. Firmaba los contratos porque confiaba en mi papá, en ningún momento pensé que me iba a engañar, lo hacía porque él lo decía. No sé nada de ese tema y nunca me interesé", declaró el jugador del Barcelona ante el tribunal.
"Me dijeron que todo era legal, que todo estaba bien", testificó Jorge Horacio Messi, aún más gráfico cuando, a una pregunta de la fiscal, describió cuáles son sus conocimientos sobre derecho tributario: "Yo, de aspectos contables no entiendo, para mí es chino básico".
