Con presupuestos magros, compuestos por cifras similares a las de los dos últimos años, pero con la variante de los aumentos de insumos y equipamientos derivados del incremento de la cotización del dólar y del proceso inflacionario que vive el país, la tarea que llevan adelante en distintas áreas los investigadores del CONICET de Salta y la región podría verse seriamente amenazada si no se destinan más partidas para el año 2019.
Así lo detallaron al diputado por Salta, Andrés Zottos, los doctores, Sara Maita y Fernando Hongn; directora del Centro Científico Tecnológico (CCT) y del Instituto Bio y Geo Ciencias del Noa (IBIGEO), del CONICET Salta respectivamente.
En momentos en que se discute en el Parlamento nacional el proyecto de Ley de Presupuesto para 2019 y siguiendo la línea expuesta días pasados por parte del directorio del CONICET ante el Congreso, sobre la situación financiera del organismo, los referentes locales detallaron al legislador nacional la amplia tarea de investigación que lleva adelante en distintos campos el CONICET y el peligro que, por falta de financiamiento, esas investigaciones que contribuyen al desarrollo social, cultural y económico de la región queden truncadas.
“Si comparamos los 13.483 millones de pesos que el CONICET recibirá este año con los 16.487 millones contemplados para 2019 vemos claramente que un 21% de incremento no cubre la inflación proyectada, ni la devaluación del peso ante el dólar”, sostuvo Zottos y agregó que más aún, “descontando de ese monto las partidas para salarios, resulta para el rubro investigación un monto de 519 millones de pesos, que es inferior a los 693 millones ejecutados durante este año, cuando Salta, la región y el país necesitan que no caiga la inversión en investigación para trabajar en su desarrollo”, reiteró.
Solo en Salta y Jujuy, el CCT incluye a más de 600 personas entre investigadores, becarios, profesionales y personal de apoyo, nucleados en ocho unidades o institutos de investigación científica, cinco de ellos vinculados directamente con la Universidad Nacional de Salta y tres con la Universidad Nacional de Jujuy, desarrollando en conjunto una amplia gama de investigaciones en materia de biología, geología, humanidades, ciencias sociales, ingenierías, química, salud, alimentos y energía, entre otras.
“Necesitamos que los laboratorios del CONICET sigan trabajando en temas tan diversos como minería, chagas, contaminación de cursos de agua, energías no convencionales y otros, y para ello vamos a luchar desde el Congreso para que reciban un presupuesto adecuado”, comprometió Zottos.