Los restos óseos hallados el domingo pasado, poco antes de la medianoche por un baqueano de la zona, se hallaban prácticamente esqueletizados, según informó el fiscal penal, Pablo Paz, de la Unidad de Grave Atentados contra las Personas.
El funcionario confirmó que el cuerpo se hallaba enterrado en una fosa de 70 centímetros de profundidad y cubierto de piedras. Realizado el levantamiento de rastros, los restos fueron desenterrados y trasladados a la morgue del Ministerio Público, donde a partir de las 17 se inició la autopsia a cargo de los médicos forenses del Cuerpo de Investigaciones Fiscales.
En el lugar del hallazgo, en tanto y según lo informado por el fiscal, se logró obtener muestras de fauna cadavérica, la cual fue resguardada a fin de realizar los correspondientes estudios de entomología necesarios para poder tener una aproximación de la data de muerte.
Paz informó que la dentadura del cuerpo se encontraba completa, por lo que se espera poder extraer de la misma muestra de ADN para un posterior cotejo genético. Respecto al sexo del cadáver, Paz indicó que “hoy a la mañana me reuniré con el cuerpo médico forenses a fin de conocer más detalles del resultado de la autopsia”, indicó.
En cuanto a las prensas de vestir recolectadas, Paz indicó que el cadáver tenía zapatillas de color negro, marca “Caterpillar” (CAT), número 41; medias tipo soquetes azul con talón y puntera roja: un pantalón jean marca Stone con bolsillos superiores y a los costados y una remera marca Oneill, talle L, de color clara y con la silueta de un hombre sobre una tabla de surf en la espalda.
Por otra parte, explicó que los investigadores de la División Homicidios, como así también efectivos de las dependencias de Coronel Moldes y otras localidades de la zona trabajan en la ubicación de familiares que hayan denunciado a personas desaparecidas, ya sean mujeres u hombres.