Luego de la presentación que hiciera el gobernador Juan Manuel Urtubey del Plan Bicentenario de la Independencia, varios funcionarios del ejecutivo provincial profundizaron en los alcances e implicancias de esta iniciativa. Entre ellos, el ministro de Hacienda y Finanzas Sebastián Gomeza se refirió los aspectos financieros que sustentan el plan.
En primer lugar lo que hay que saber de esta nueva propuesta, es que se conforma de dos proyectos ley cuya aprobación legislativa es necesaria para la viabilidad del Plan Bicentenario. El primero de ellos, se refiere al ACUERDO NACION-PROVINCIAS por el cual a Salta se le devolvería de forma progresiva y escalonada, el 15% de coparticipación que hoy se encuentra retenida por el Gobierno Nacional. La devolución se realizaría por año y en tramos del 3%, hasta completar el monto adeudado.
El segundo de los proyectos de ley, busca habilitar al ejecutivo provincial para la toma de un crédito internacional de hasta 350 millones de dólares. El ministro de Hacienda señaló que ambos proyectos responden a políticas anticíclicas, destinadas a reactivar la economía provincial; y hacer frente a los efectos de las medidas macroeconómicas tomadas a nivel nacional.
“Si este crédito nos sirve para darle a los salteños más agua, luz y mejores escuelas, va a ser muy bueno para la provincia. El Plan Bicentenario inyectará más recursos a los municipios y respeta el equilibrio de las finanzas provinciales; con él buscamos generar una reactivación genuina tomando mano de obra local”, expresó Sebastián Gomeza.
Según el titular de Hacienda, de tomarse el crédito internacional el stock de deuda llegaría a un 41% de los recursos corrientes anuales, muy por debajo del 70% permitido por la Ley 7.030 de Disciplina Fiscal provincial.
Números y porcentajes del Plan Bicentenario
En caso de aprobarse la devolución escalonada del 15% de coparticipación nacional, Salta recibiría durante este año 542 millones de pesos. Con respecto al crédito internacional, Gomeza señaló que se busca realizar una colocación de entre 7 a 12 años; y “se pone un tope de hasta 350 millones de dólares para poder negociar tasas más bajas y mejores condiciones para la toma del crédito”.
Sin embargo la relevancia de estos datos se vuelve más notoria, al especificarse cómo serán distribuidos estos recursos entre los municipios provinciales. En este sentido, el Plan Bicentenario prevé un mayor flujo de fondos directos para los municipios a través de dos medidas: a) el incremento de la coparticipación municipal que pasará del 13,5 al 15%, y b) la remisión a los municipios, del 20% de los recursos originados por el crédito internacional. El 80% restante será administrado por la Provincia en obras de infraestructura social y la adquisición de bienes preexistentes y maquinaria de trabajo.
Gomeza puntualizó que este nuevo flujo de fondos, no está previsto en ningún presupuesto municipal y se adicionan a la coparticipación que ya reciben los sesenta municipios.
Participación ampliada y una apuesta al diálogo gubernamental
“El Plan Bicentenario no solo es una propuesta de generación de recursos y obra pública. Expresa la visión amplia de este gobierno y su conductor de no centralizar los recursos, ni el poder, dando a los municipios las herramientas necesarias para generar más autonomía y una descentralización efectiva”, expresó el ministro de Hacienda y Finanza.
La propuesta que sostiene esta posición, está dada por la creación de las COMISIONES DEPARTAMENTALES (propuesta en el plan) para discutir el destino del 20% de los recursos financieros originados por el crédito internacional, y que será remitido a los municipios provinciales.
Las comisiones departamentales estarán compuestas por los intendentes, legisladores departamentales y miembros del poder ejecutivo. “Los fondos serán de libre disponibilidad y será un momento en donde se deba llegar a una buen dialogo; en definitiva se deberá trabajar para el bien común de todos los salteños” expreso Gomeza.
Con este estado de situación y la propuesta realizada, resta esperar cuál será el destino del Plan Bicentenario en las cámaras legislativas, y saber si la provincia y los municipios contarán con los recursos financieros necesarios para generar nuevas obras públicas y completar las que ya tienen un estado avanzado de ejecución.